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Gestión de tesorería

11 consejos de planificación financiera para optimizar la liquidez de tu empresa

June 9, 2023

En el mundo empresarial, la gestión financiera eficiente es fundamental para el éxito y la supervivencia de cualquier negocio, sea cual sea su actividad y la forma en la que opere. En este sentido, la liquidez, es decir, la capacidad de una organización para cumplir con sus obligaciones financieras a corto plazo, se convierte en un factor clave en la toma de decisiones estratégicas. 

Por eso, y con el objetivo de ayudar a las empresas a optimizar su liquidez y alcanzar una salud financiera sólida, presentamos en este artículo 11 consejos de planificación financiera que permitan a las empresas mantener un flujo de efectivo constante, minimizar los riesgos y aprovechar al máximo sus recursos financieros. 

¿Cómo optimizar tu planificación financiera? 11 consejos para conseguirlo

  1. Establece un presupuesto detallado

El presupuesto es una herramienta financiera que establece un plan detallado de ingresos y gastos de una empresa durante un período determinado. Son estimaciones cuantitativas que permiten asignar recursos financieros de manera eficiente y planificar el uso de fondos para lograr los objetivos comerciales.

En general, los presupuestos son los documentos más importantes para planificar tu gestión empresarial, ya que contribuyen a planificar las actividades a nivel financiero de un negocio y proporcionan información muy valiosa que ayuda a establecer metas y objetivos claros. Además, permiten definir los recursos necesarios para alcanzar esos objetivos y proporcionan una guía para la toma de decisiones financieras.

En este presupuesto deben constar la proyección de ingresos y gastos para el periodo de estudio, y de la forma más detallada posible. 

  1. Gestiona el inventario de manera eficiente

Muchas empresas, especialmente aquellas que tienen su actividad en el mundo del eCommerce, tienen que gestionar su inventario de la forma más eficiente posible, anticipándose a la demanda que va a tener su negocio en el momento del análisis.

En general, lo ideal es que el stock del negocio sea el suficiente como para abastecer esa demanda, con un pequeño margen de seguridad para satisfacer ciertos picos (el conocido como stock de seguridad). De esta manera, podrás abastecer todos los pedidos de forma eficiente sin que esto signifique incurrir en costes de almacenamiento.

Para optimizar la gestión de tu inventario, es importante implementar un sistema de gestión de inventario que se ajuste a la realidad empresarial. Estas herramientas te permiten realizar un seguimiento preciso de tus productos, controlar los niveles de stock, gestionar pedidos y automatizar procesos como la reposición de inventario.

  1. Analiza y reduce tus gastos operativos

La gestión eficiente de los gastos operativos es crucial para maximizar los beneficios y mantener una salud financiera sólida. Examina detenidamente tus gastos operativos para identificar áreas en las que puedas reducir tus costes. 

Para ello, puedes empezar por revisar tu estado financiero, facturas y registros contables para comprender en detalle cómo se distribuyen tus gastos. Presta especial atención a los gastos fijos y variables, y determina cuáles son esenciales y cuáles podrían reducirse o eliminarse.

Además, identifica áreas en las que puedas mejorar la eficiencia operativa y reducir costes. Considera la automatización de procesos, la optimización de la cadena de suministro, la revisión de los métodos de producción o la adopción de tecnología que simplifique y agilice las operaciones. Capacita a tus empleados en prácticas de eficiencia y fomenta una cultura de ahorro y control de costes en toda la organización.

  1. Negocia con tus proveedores

Dependiendo de la capacidad de negociación que tengas con tus proveedores, es importante que, en la medida de lo posible, renegocies condiciones de pago más favorables para tu empresa.

La información es poder y, por tanto, antes de comenzar cualquier negociación, investiga y compara diferentes proveedores, analiza aspectos como precios, calidad de los productos o servicios, plazos de entrega y condiciones de pago. Esto te dará una base sólida para negociar y te permitirá identificar las mejores opciones disponibles en el mercado.

Y en cuanto cierres una negociación, es importante mantener una comunicación abierta, continua y transparente con ellos, y busca establecer una relación de confianza mutua. Cuanto más sólida sea tu relación con los proveedores, mayor será tu capacidad para negociar términos y condiciones favorables.

  1. Controla tus cuentas por cobrar

Además de los proveedores, también debes prestar especial atención a las relaciones con tus clientes. En general, debes intentar que estos te paguen a la mayor brevedad posible, y si puede ser al contado, mucho mejor.

Puedes comenzar por incentivar estas estrategias, facilitando descuentos por pronto pago o por volumen de compras. 

En general, es importante establecer políticas claras y bien definidas para el crédito y el cobro de tus clientes. Define los plazos de pago y comunícalos de manera transparente. Especifica las consecuencias de los pagos atrasados, como cargos por intereses o suspensiones de servicios.

  1. Diversifica tus fuentes de ingresos

Diversificar tus fuentes de ingresos es una estrategia efectiva para optimizar la liquidez de tu empresa. De hecho, depender únicamente de una fuente de ingresos puede dejar tu negocio vulnerable a riesgos y fluctuaciones del mercado.

Para ello, es importante analizar tu mercado y comprender las necesidades y demandas de tu cliente objetivo. Una vez lo hayas hecho, podrás identificar áreas o segmentos adicionales en los que puedas expandir tu negocio y ofrecer productos o servicios complementarios que satisfagan una necesidad real.

Además, siempre puedes considerar expandir tu línea de productos o servicios, establecer alianzas con otras compañías o explorar nuevos mercados o segmentos específicos. 

  1. Realiza proyecciones de flujo de caja

Al igual que ocurre con el presupuesto, donde se detalla la evolución futura de ingresos y gastos, debes hacer lo mismo con tus proyecciones de flujos de efectivo. La diferencia fundamental entre ambos conceptos es que mientras el presupuesto se refiere a las pérdidas y ganancias del negocio, el flujo de caja hace referencia a las entradas y salidas de dinero.

En este caso, podrás saber si tu empresa puede hacer frente a tus obligaciones a corto plazo, como el pago a proveedores, el pago de salarios, la adquisición de los materiales o el pago de impuestos, entre muchos otros.

Pero, además, un flujo de caja saludable contribuye a que la empresa pueda realizar inversiones estratégicas para financiar su crecimiento. Poder destinar efectivo a la adquisición de activos, investigación y desarrollo, expansión del negocio o marketing, por ejemplo, contribuye a mantener la competitividad y aprovechar oportunidades de mercado. Sin suficiente flujo de efectivo, el crecimiento se verá obstaculizado y la empresa puede quedarse rezagada frente a la competencia.

  1. Establece reservas de efectivo

La reserva de efectivo es un fondo de emergencia que una empresa constituye a partir de sus ingresos. Es una forma de protección financiera y actúan como un colchón para hacer frente a situaciones imprevistas. A nivel contable, supone mantener un cierto margen en el activo circulante para financiar el pasivo corriente.

Cada empresa puede tener unas necesidades de efectivo diferentes, lo que influye en las reservas de efectivo del negocio. Por eso, debes realizar un análisis de tus flujos de efectivo y evalúa tus necesidades de reserva en función de la naturaleza de tu negocio, su estabilidad y el grado de incertidumbre.

Posteriormente, puedes definir una estrategia para ahorrar y acumular las reservas de efectivo. Puedes establecer un porcentaje fijo de tus ingresos mensuales o establecer objetivos específicos basados en periodos de tiempo. Asegúrate de que el plan sea realista y alcanzable, considerando las necesidades operativas y los requisitos de liquidez de tu negocio.

  1. Renegocia tus deudas

Uno de los mayores peligros para la gestión de la liquidez de tu empresa son las deudas, y más concretamente, la financiación a corto plazo, ya que ponen en riesgo su capacidad para hacer frente a sus obligaciones y, en las situaciones más extremas, puede abocar al negocio a una suspensión de pagos.

En una situación en la que las deudas pueden comprometer la viabilidad del negocio, es importante tomar decisiones sobre la situación de tus deudas. Por un lado, es importante amortizar los préstamos con los intereses más elevados. Pero si esto no es posible, también puedes optar por una renegociación de tus deudas, especialmente para convertir la deuda a corto por deuda a largo plazo (a más de un año).

  1. Revisa y ajusta tus precios

Ni tan barato como para no poder cubrir tus costes de producción, ni tan caro como para no tener la demanda deseada. Encontrar el punto de equilibrio de tus precios es uno de los aspectos más complejos en cualquier gestión empresarial. Sin embargo, al mismo tiempo, es un proceso que debe estar en continua revisión y ajuste.

Si quieres ofrecer el mejor precio para tus productos, es importante analizar el entorno competitivo y la demanda del mercado para determinar si tus precios están alineados con el valor que ofrecen tus productos o servicios. Realiza investigaciones de mercado, encuestas o análisis de la competencia para comprender las tendencias de precios y las expectativas de los clientes. Ajustar tus precios en función de la demanda te permitirá ser más competitivo y maximizar tus ingresos.

Pero, además, debes revisar tus estructuras de costes y márgenes de ganancia para determinar si tus precios actuales son rentables. Por supuesto, es importante que consideres tus costes de producción, los gastos operativos, los márgenes de ganancia deseados y los márgenes de la industria. Si descubres que tus precios actuales no te permiten obtener ganancias satisfactorias, es posible que necesites realizar ajustes para garantizar la rentabilidad a largo plazo.

  1. Utiliza softwares específicos de gestión financiera

Por último, pero no menos importante, terminamos este repaso con uno de los aspectos más importantes en la actualidad: la digitalización de tu negocio. 

En la actualidad, planificar tus finanzas pasa por utilizar software empresariales específicos. Este tipo de aplicaciones permiten realizar la gestión financiera completa, que incluye todo lo que tiene que ver con la tesorería: conectividad bancaria, flujos de efectivo, contabilidad automática, etc.

En este sentido, Embat ofrece soluciones financieras integrales para ayudarte a gestionar tu liquidez, controlar tus flujos de efectivo y tomar decisiones informadas. ¡Descubre cómo Embat puede impulsar el éxito de tu negocio hoy mismo!

Toni
Berga
Co-founder @ Embat
Toni trabajó más de una década en J.P. Morgan en España y Reino Unido como director ejecutivo del área de banca de inversión y banca comercial para empresas familiares antes de cofundar Embat.

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